Los niños sueñan, y estos sueños no son siempre lugares apacibles como nos gustaría pensar. A veces, transportan a mundos infernales, delirantes y opresivos. Algunos incomprensibles, algunos tremendamente probables...
Cuando somos pequeños las pesadillas se viven intensamente, pero a medida que crecemos entendemos que todo lo soñado es irreal y con el tiempo aprendemos a relativizar para progresivamente comenzar a olvidar.
Y es aquí donde entra Arthur Tess, un fotógrafo estadounidense que se interesó por ese submundo infantil y decidió plasmarlo con sus fotografías.
El artista trabajó en conjunto con varios niños en la década de los sesenta y
setenta, estos le contaban sus pesadillas y él recreaba escenas
surrealistas que atormentaban en sueños a los pequeños...
“Nunca hallarás lugares así dando vueltas por el mundo. Los tuve que
recrear y me convertí en un raro, porque aquello empezó en torno a 1970:
todos los fotógrafos estaban por entonces locos por callejear y yo era
el único que hacía fotos teatralizadas. Buscaba imágenes míticas y
arquetípicas, pesadillescas. Se convirtió en mi marca de fábrica durante
veinte años: fotografías surreales y perturbadoras”, explica Tress.
Sin duda su estilo suscita todo aquello que nos hace estremecer, con esos matices oniricamente terrorificos, tan irracionales y tan cercanos a la irrealidad que solo una mente infantil puede recrear.
Os presento a SOPHIA, el primer robot humanoide capaz de interactuar con el ser humano y tener conversaciones sencillas. Fue diseñada para trabajar y adaptarse al comportamiento de las personas con la finalidad de aprender y adaptarse a nosotros.
Algunos la han catalogado como el primer robot capaz de desarrollar inteligencia artificial, es decir, estaríamos suponiendo que Sophia sería capaz de imitar las funciones cognitivas que se asocian con la mente humana como percibir, razonar, aprender y resolver problemas. Pero ¿es eso a día de hoy posible?
Para entrar en situación, os daré algunos datos de interés ;
Fue activada el 19 de abril de 2015.
Está inspirada en la actriz Audrey Hepburn.
Tiene procesamiento de datos visuales y reconocimiento facial, con lo cual imita gestos humanos.
Puede contestar a ciertas preguntas y tener conversaciones sencillas sobre temas predefinidos.
Usa tecnología de reconocimiento de voz y esta diseñada con capacidad de aprendizaje.
Su software IA analiza conversaciones y extrae datos que le permiten mejorar su respuesta con el tiempo.
Fue diseñada para acompañar a ancianos incapacitados o ayudar a las personas en situaciones donde hay grandes aglomeraciones de personas.
Sin duda alguna, cuando vemos interactuar a Sophia nos invade un sentimiento futurista de que los avances tecnológicos no tienen límite. Fantasear con la idea de seres artificiales que piensan y sienten como nosotros y que nos superan intelectualmente da un poco de vértigo.
¿Es este, el principio del fin de la raza humana como la conocemos?, ¿Terminaran las máquinas suplantandonos y superandonos?
¿Por que es tan especial Sophia?
Es el primer robot que combina muchos tipos de inteligencias diferentes, como reconocer objetos, sintetizar en varios idiomas su lenguaje natural, esta diseñada con las últimas actualizaciones en movilidad y gesticulación y por último cabe destacar su extraordinario realismo.
Existen empresas que han conseguido por separado todos estos logros, pero Sophia es la primera que los reúne todos juntos en uno.
Sin embargo, el principal problema que tiene nuestra extraordinaria amiga es que realmente no piensa por si misma, su sistema de comunicación es similar a lo que conocemos como un "Chatbot".
Un chatbot no es mas que un sistema con la posibilidad de aprender sobre nuestros gustos y preferencias con el paso del tiempo, con lo cual te ayudan a encontrar soluciones. Podemos encontar este tipo de sistemas en Siri o Cortana que son asistentes personales que pueden responder preguntas, hacer recomendaciones... Te muestran en definitiva aquello que puedan recopilar a través de internet, ya sea un buen restaurante, como darte información sobre cualquier cosa a la que tengan acceso por la red. Son aplicaciones con inteligencia virtual, pero esto no puede confundirse con inteligencia artificial.
Por lo tanto ¿Es Sophia verdaderamente un robot con inteligencia artificial? Desgraciadamente no. Aun queda mucho para que los robots puedan pensar por si mismos y contestar a las preguntas existenciales que tanto nos caracterizan como seres humanos de un modo meditado y genuino como solo nosotros sabemos, sin que estas hayan sido introducidas artificialmente por un ser humano en su sistema operativo. Sophia no puede pensar, sentir o soñar como nosotros. De momento seguimos siendo los únicos en este planeta con esta capacidad.
Y para terminar y como opinión personal, considero que en un futuro no muy lejano quizás sí sea posible convivir con Inteligencias Artificiales como en Westword, capaces de imitarnos en todo y superarnos en fuerza, adaptación, inteligencia y apariencia física. Hemos llegado a conseguir cosas maravillosas, como viajar fuera del planeta, clonar ovejas, crear órganos artificialmente, incluso devolver a un cerdo muerto a la vida, después de una hora sin pulso... (si os interesa otro día os hablaré de ello). Sin duda alguna no tenemos límites, así que ¿por que no?